Es uno de los propósito de año nuevo más repetidos: sacar tiempo para mi. Seguro que está presente en tu lista, incluso aunque no redactes formalmente ninguna. Con el tiempo cada vez asumimos más responsabilidades, tenemos más asuntos que atender y encargarse de una misma es algo que queda en segundo plano. Si cuentas con servicio doméstico en Madrid ya sabrás que es una de las maneras más eficaces de regalarte tiempo. Si no, vamos a contártelo.
El trabajo, la casa, los niños, el gimnasio, mantener cierta vida social, encargarse de la familia … Son acciones que forman parte de nuestra rutina y que llevamos a cabo, en ocasiones, de forma automática y contrarreloj. Es algo que tenemos que hacer, con lo que nos hemos comprometido y, como tal, lo hacemos. No nos paramos a pensar en que también es necesario tener tiempo para una misma. Ya sea para leer un libro, para quedar con las amigas a tomar un café, para ir a ver una exposición o simplemente disfrutar de una cena romántica con tu pareja.
Momentos imprescindibles, no egoístas
Se trata de estos pequeños momentos de relax y disfrute que, aunque parecen poca cosa, son necesarios, incluso imprescindibles. Es un error, bastante habitual, verlos como caprichos o actos egoístas. Se trata de gestos que son los que te permiten afrontar tu día a día y facilitan que todo funcione bien.
Hoy en día estamos asentadas en la creencia que podemos con todo. Y sí, es cierto, pero ¿a qué precio? ¿es realmente necesario? Aprender a delegar tareas es importante a todos los niveles de tu vida, no sólo en el trabajo. Si tras una jornada laboral llegas a casa y te espera otra jornada maratoniana de cocinar, limpiar, poner lavadoras, hacer deberes con tus hijos y planificar la agenda de toda la familia cuándo descansas, cuándo disfrutas.
Contar con alguien de confianza, como una empleada del hogar con contrastada experiencia y profesionalidad como las de Empleada en casa te permitirá dejar esas tareas en sus manos y ganar tiempo para lo que tú quieras. A la hora de seleccionar a la persona adecuada para hacerlo tenemos en cuenta las que son tus necesidades y los servicios que precisas cubrir.
Complemento que se ajuste a ti
A partir de ahí trabajamos para encontrar a la persona que se amolde a tu día a día y que se convierta en el complemento perfecto para encargarse del cuidado del hogar y los niños, incluso de los dependientes que pueda haber en el domicilio. Si necesitas una ayuda por horas la mejor opción es decantarse por una empleada externa. Elige entre jornadas de 4 y 8 horas, o una ampliable hasta las 12.
Cuando tus necesidades son mayores y lo que precisas es tener a alguien siempre en casa para atender las tareas, pero también con la que sabes puedes contar cuando surja un imprevisto, la opción de una empleada del hogar interna es la que mejor se adapta a ti. Así, tu única preocupación será cómo distribuir todo el tiempo que tienes libre para aprovecharlo al máximo.