Son muchas las familias que se encuentran ante la tesitura de tener que decidir qué hacer cuando los mayores de la familia necesitan ayuda para poder seguir viviendo en casa. Llegado el momento, encontrar a una cuidadora interna que les permita seguir en su casa con los cuidados necesarios para mejorar su calidad de vida, es más fácil y seguro si contamos con ayuda de profesionales que nos aporten calma y tranquilidad.
No cabe duda de que en esta situación lo que se busca es el bienestar de padres y abuelos, lo que queremos es darles todos los cuidados que puedan precisar y que nada les falte en los últimos años de sus vidas. Es por eso que confiar en profesionales de otros centros es la primera idea, pero sin embargo, está demostrado que para ellos es mejor permanecer en el hogar. Nadie les va a cuidar mejor que nosotros mismos, algo que siempre les anima y produce bienestar.
Poco tiempo y conocimientos
No cabe duda de que los hijos no siempre tienen el tiempo ni los conocimientos necesarios para hacerse cargo de las necesidades que pueda tener una persona mayor, en ocasiones relacionadas con problemas de movilidad o de demencia. Es entonces cuando contar con la ayuda de una cuidadora interna puede ser lo que necesitas.
Si es lo que precisas, buscamos a profesionales que tengan conocimientos geriátricos y experiencia cuidando a mayores con necesidades similares a las de tu familiar. Así tendrás la seguridad y confianza de que es personal competente el que se encarga de él cuando tú no puedes.
Permanecer en el hogar es algo que mejora el estado de ánimo de las personas mayores, les evita caer en estados depresivos y puede suponer un menor impacto en su deterioro cognitivo. Están en un entorno que conocen y en que se sienten seguros, mientras que llevarlos a una residencia supone un gran cambio para ellos, que no siempre saben afrontar.
Menos cambios, mejor calidad de vida
Estando en su casa, o en el hogar de alguno de sus hijos, no percibirá grandes cambios en su vida. Seguirá teniendo a los suyos cerca, también a sus médicos y podrá ver con asiduidad a sus amigos. Cuando, además, tienes un servicio doméstico en Madrid que te ayuda a cuidarlo, podrás tener un conocimiento con detalle de cómo se encuentra, qué necesita, si sufre alguna molestia o deterioro… Todo ello repercute en una mayor calidad de vida y, por ende, en una mejor salud.
No cabe duda que, además, para la propia familia resulta más cómodo, porque están juntos y no tienen que programar visitas a un centro ajeno. Tanto su rutina como la tuya se integran y complementan, de tal manera que no supone ningún esfuerzo adaptarse a los tiempos y necesidades de cada uno,
Si necesitas a alguien que te ayude con el cuidado de una persona mayor no dudes en contactar con Senniors. Que ofrece a las mejores profesionales, todas con contrastada experiencia y formación sociosanitaria.